A los gatos ni tocarlos: A la Caza del Depredador en Línea
El oscuro universo del true crime y la cruda realidad de las redes sociales se entrelazan en el último lanzamiento documental de Netflix, “A los gatos ni tocarlos: Un asesino en internet”. Este relato inquietante desentraña la historia real que pone a prueba la utilidad de las plataformas digitales cuando se trata de rastrear a un depredador cibernético. En el epicentro de esta narrativa se encuentra Luka Magnotta, un canadiense nacido en 1982, y su víctima, una estudiante internacional china.
El documental despega en mayo de 2012, cuando un video de un asesinato conmociona al mundo. Luka Magnotta, ya conocido por subir videos inquietantes a Internet, se convierte rápidamente en el epicentro de la atención global. La víctima, Lin Jun, una estudiante internacional china, se convierte en el foco de una caza virtual desgarradora. Magnotta, un actor porno, es acusado de un crimen espantoso: asesinato, descuartizamiento y violación del cuerpo de Lin Jun.
Explorando los Abismos Virtuales en una Búsqueda Desesperada
Los productores Dimitri Doganis y Adam Hawkins, expertos tras éxitos como ‘El impostor’, ‘American Animals’ y ‘Tres idénticos desconocidos’, logran extraer la esencia de una historia que pasó desapercibida para muchos. El documental narra la historia a través de los propios protagonistas, sumergiendo al espectador en los límites borrosos de las redes sociales y la moralidad humana.
“A los gatos ni tocarlos: Un asesino en internet” no solo arroja luz sobre el asesinato y la caza virtual, sino que también plantea preguntas inquietantes sobre la ética en línea y la responsabilidad de las plataformas digitales. La trama se desarrolla con crudeza, exponiendo la conexión entre la sed de atención en línea y los actos más atroces del ser humano.
“A los gatos ni tocarlos: Un asesino en internet” no solo arroja luz sobre el asesinato y la caza virtual, sino que también plantea preguntas inquietantes sobre la ética en línea y la responsabilidad de las plataformas digitales. La trama se desarrolla con crudeza, exponiendo la conexión entre la sed de atención en línea y los actos más atroces del ser humano.
